2° Designio: Tiempos de Paz

Pesadumbre, derrota y resignación, era lo único que se reflejaba en su rostro que miraba vagamente cualquier sitio que no fuera el rostro de su hermano pervertido. Apenas pestañeo y miró de reojo a su hermanito, pero cuando este poso su mano sobre su pecho lo miró directamente, ¿ahora que quería?. "Sigues sin tener busto, ¡come más!", le "exigió".

-¿QUE?!!, ¡¡ARG!!, !!!MALDICIÓN, NO SOY UNA CHICA!!!

Era el colmo, se crispo de inmediato, le dio un manotazo a la mano de su hermano y lo golpeo duramente en la cabeza sin ninguna misericordia, parecía un demonio de Tanzania enfurruñado, era el colmo, era le colmo... se repetía sin cesar Gretel en la mente mientras le gritoneaba al otro que lo "insultaba" cada vez más.

-ADEMÁS, NO QUIERES UN HERMANO GORDO, ¡¿VERDAD?!

Era de conocimiento general que los chicos gordos si que parecían tener busto, pero de eso a que se lo exigiera, arg, eso si que lo saco de sus casillas, así que con enojo agarro el corsé arrancándoselo de la mano a Hansel y tirándolo al suelo para pisotearlo, lo miró aun enojado, faltaba esperar como reaccionaria, su enojo tal vez le había hecho olvidar como reaccionaba comúnmente a sus negativas e iracundas respuestas.

Vio el corsé en el suelo y sintió como su cabeza palpitaba donde su hermano había acertado el golpe, en eso si era muy diferente a una chica, el si golpeaba con fuerza, dolía… Acaricio su cabeza con su mano desnuda a la que por cierto también había golpeado y solo se mostró con un serio semblante. En cierto modo se lo había buscado, sabia que su hermano reaccionario así y aun así lo hizo, como si gustara de verlo cambiar de humor.

Inclino su cuerpo y recogió del suelo el corsé que aun pretendía ponerle, se acerco a su hermano y lo rodeo para que así fuese mas fácil ponerle la prenda sonriendo una vez se encontraba tras de el, como si buscara saber cual seria la reacción de su hermano al verlo tan “serio”.

Paso el corsé alredor de su hermano y lo ajusto a su figura mientras metía el cordel entre los agujeros de este para comenzar a apretarlo sin decir una palabra, esperando a ver cual podría ser ahora la reacción de su hermano, ansioso por verlo expresarse.

Su mirada furica siguió a su hermano, observando todo aquello que hacia, incluso cuando se le acercó hizo un pequeño hito de rechazo, pero en fin, lo miro, lo miró y la seriedad que este ponía lo intrigaba, lentamente el enojo se disipo tratando de adivinar los pensamientos de su hermanito, su preciado hermano que con esa cara de seriedad se veía tan raro, al menos para él así era.

De pronto su cuerpo fue atrapado entre tela y varilla, se dejo mansamente mientras miraba su mano con al cual golpeo a su hermanito, miró tras su hombro, tratando de ver a su hermano, su silencio lo perturbaba más que cualquier cosa, eso era exactamente lo que había olvidado que calmaba toda su furia, la seriedad maligna de su hermano que bien lo hacia calmarse no importando que.

-¿Riful?

Le llamó mientras sentía como el corsé apretaba su delgado cuerpo. Acaricio sus dedos un poco apenado por haberle pegado tan fuerte, pero se lo había merecido, como todas aquellas veces anteriores a esa. Suspiro tranquilo y simplemente hablaba mientras su hermano le vestía, pero dentro de poco seguro lo exasperaría de nuevo y saldría huyendo, peor mientras un tenue velo de tranquilidad se dejo respirar entre los hermanos.

-no lo aprietes mucho, quiero que se vea natural y no pienso salir ahora, ¿esta bien?

Pregunto ingenuo, sabiendo la respuesta pero parecía inconsciente la pregunta, solamente para alterar su estado de animo tan repentinamente como hace unos minutos.

Si, esa era la reacción que se podía esperar de Gretel cuando su hermano se mostraba tan serio, definitivamente, por más que lo negara o se aferrase a una mentira, el, mas que un cualquier otro, era la persona más linda del mundo, toda una monada, o al menos así era a ojos del pelinegro quien parecía necesitar lentes, ¿Quien más pensaría que su hermano era una monada? Era violento, agresivo, gritón, malhablado, etc.

La sonrisa de Hansel se torno gigantesca mientras un gran sentimiento de satisfacción y embelesamiento lo llenaban por dentro, esas eran las reacciones que amaba ver en su hermano, ni el mismo sabía de donde tomaba fuerza para no abrazarlo en ese momento. Definitivamente lo amaba como hermano.

Paso largo rato en lo que apretaba el corsé para su hermano, todo ese tiempo se mantuvo en silencio solo esperando el momento perfecto para romper la farsa, tan solo quería que el golpe fuera aun mejor de lo que Gretel pudiera esperar. Como era de esperarse apretó lo mas que pudo el corsé, como era lo habitual en ese tipo de prendas jalo y jalo hasta que su hermanito soltó un “ah” que significaba estaba bien puesto. Esa era su particular forma de decir “ni hablar”.

Una vez termino y pudo hacer uso nuevamente de sus manos abrazo el cuerpo de su hermano y solo recargo su frente en la cabeza de este, aun taz de el, en total silencio, como si se encontrara deprimido o buscara una disculpa al comportamiento de su hermano aunque claro todo era parte de un meticuloso plan para hacer rabiar a su hermoso, lindo, bello, hermoso y maravilloso hermano.

Casi estrangula y rompe sus huesos al apretar ese corsé, es problema de esto es que era delgado, pero estaba firme su cuerpo y el corsé siempre le dejaba marcas sobre la piel y lo dejaba adolorido, después de todo trataba Hansel de formar una figura femenina y Gretel dentro de todo lo que poseía su cuerpo, definitivamente no tenia un cuerpo femenino, ni siquiera lo que se podría decir "flaco", era una tortura el dichoso corsé, no entendía porque algunas mujeres lo utilizaban, era un instrumento de tortura en todo sentido.

-tsk...

Fue lo que salio de sus labios en vez de un delicado "ah", le dolía y eso era lo único que podía decir de todo eso. Respiró con dificultad en lo que se acostumbraban sus pulmones estrechados entre varillas, alzó la vista observando en los espejos a su hermano acercar su frente hasta que esta se quedo apoyándose en su cuerpos, entrecerró los ojos haciendo un puchero, lo detestaba como persona pero lo amaba inmensamente como su hermano, las manos de Hansel pasaron para enfrente cuando lo abrazó, Gretel suspiró resignado y por fin acostumbrado a respirar lentamente, posó sus manos sobre las de su hermano y mientras acariciaba una la otra mano de inmediato tomo una pequeña porción de carne entre los dedos y apretó mientras que la retorcía, un pellizco bien dado fue lo que recibió su hermanito, por quererse pasar de listo.

-no te pases de listo... hermanito.

Sonrió ampliamente mirándolo por los espejos, una sonrisa para nada amigable, pero que contenía ese feroz carácter que era capaz el dulce y delicado Gretel de mostrar sin piedad cuando se desesperaba.

El fuerte pellizco lo obligo a soltar un leve quejido, esta situación había destruido sus planes, obviamente su hermano ya había notado su trampa y ahora no podía decir un alegre “te engañe”. El bien aplicado pellizco de su hermano dejo una marca roja en esta, marca que con el tiempo se convertiría en un pequeño moretón. Separo sus manos del cuerpo de su hermano y solo comenzó a reír, mostrándose alegre al hacerlo, algo muy raro en el, después de todo el era una persona muy callada e incluso algo seria.

- Que cruel - acuso al rubio teñido una vez término de reír. Llevo su mano a la boca y cual gatito comenzó a lamer la zona que le dolía, por muy delicadas que fuesen las manos de Gretel, seguían siendo mortales.

Termino de lamer su “herida” y se limito a recoger el vestido que había dejado en el suelo y abrirlo para que su hermano pusiera los pies dentro y pudiera ponérselo, este era un gran vestido color negro, con olanes blancos, encajes y botones dorados. El vestido era muy similar a un traje de gala masculino adaptado para ser un vestido, era muy bello.

Spoiler:

-Tonto...

Sus ojos se estrecharon y lo miraron por los espejos, riendo él también pero obviamente forzando su sonrisa, dejo de reír y suspiró resignado, como por 5a vez en ese día, su hermano, un gatito delicado, tierno y hasta abrazable era el mismo demonio que podía sacar las uñas y rasguñar dejando infectada una herida o era capaz de morder o incautar a cualquiera con esos preciosos ojos que tenía y que se esmeraba en ocultarlos así como él mismo ocultaba su color original de cabello.

-no soy cruel, soy sincero.


Terminó de decirle mientras observaba el lujoso vestido, era bonito, lo aceptaba, pero no como para vestirlo, sino para verlo vestir a una preciosa damisela, la cual por desgracia iba a ser él mismo. Tranquilo como estaba ahora se coloco en posición para ponerse el vestido, adentrando sus pies e incluso empezar a levantar y acomodarlo para que no quedara chueco, como era la gran costumbre de Hansel.

-vamos, ayuda más hermano.

Ahora estaba irritado porque su hermano se embobaba cuando se colocaba esos vestidos y dejaba de ayudar a colocarlo, como si un vestido semi puesto fuera algo lo cual admirar, o algo así, bueno, tal vez era algo digno de mirar... se imagino una linda chica con el vestido semi puesto, de inmediato su mejilla derecha se tiño un poco y desapareció la sensual mujer de sus pensamientos al agitar su cabeza bruscamente. ¿en que estaba pensando en una situación así?, ¡él era el que llevaba el vestido semi puesto!

Lentamente comenzó a subir el vestido, con el mayor cuidado posible procurando no perderse en extrañas fantasías como solía pasar cuando estaba por terminar de vestir a su hermano. Como era de esperarse termino por perderse en su mente, lo que obligo a su pequeño y adorable hermano a interferir, cualquiera lo hubiera echo, estaba vistiéndolo mal.

Su fantasía siempre era la misma, o al menos eran muy similares, habitualmente esta incluya a su hermano, actuando tal y como Hansel lo veía: Dulce, tierno, cariñoso, amoroso y femenino. De echo, en esta fantasía, Gretel era casi una chica, una hermanita menor agradeciendo siempre a su hermano por todos sus esfuerzos… La pregunta en todo esto es: ¿Qué lo lleva a soñar con estas fantasías? ¿Estará tan traumado por tener un hermano violento que se invento uno imaginario?

Cual fuese la respuesta, no importaba, igual amaba a su rubio hermano, aun siendo este un violento agresivo. Y hablando de agresividad, esta misma fue la que lo hizo despertar de su muy maravillosa fantasía justo donde Gretel le decía “Luzco linda? Onii-chan?” al puro estilo japonés con las mejillas al vivo carmín.

- luces hermosa – Alcanzo a contestar Hansel mostrando un ligero rubor en sus mejillas mientras el otro rompía su burbuja de felicidad. Enfoco su atención en terminar de ponerle el vestido ayudado por su hermano para que este quedara como debía ser, no podía permitir que su hermano luciera mal con tan hermoso vestido.