Koumori Warai

Nombre Completo: Koumori Warai.
- Alias: no tiene ninguno concreto.
Sexo: Masculino
Edad: parece rondar la treintena

Ocupación: Asistente de la alcaldesa.

Descripción Física: Cabello plateado, largo, suelto a excepción de algunas trenzas, con un flequillo que le cubre los ojos, los cuales, a pesar de no verse, son bastante atractivos. Una larga cicatriz recorre su cara, en la que luce una sonrisa casi permanente, cuello y meñique izquierdo, y cuyo origen jamás confesará. Lleva uñas largas y pintadas de negro. Viste completamente de negro, con un sombrero de copa alto, y su único toque de color es una bufanda gris que le cruza el pecho como una banda.

Descripción Psíquica: Le gusta actuar de modo tenebroso, ya que le divierte asustar a los demás con su apariencia y sus actos. Habitualmente se muestra cínico y burlón con el resto de la gente, si bien también es capaz de comportarse con total cortesía y caballerosidad con ellos una vez que se ha sentido a gusto demostrando su superioridad. A pesar de que su apariencia parece corresponderse con una persona caótica, y de que ciertamente para los estándares humanos su mente no es normal, en el fondo se trata de una persona ordenada y meticulosa, quizás incluso hasta el extremo de la obsesión.

Cualidades: Es un apasionado de los mecanismos de relojería, también siente afición por la jardinería. Tiene nociones de hipnotismo, para lo que suele utilizar un elegante reloj de bolsillo que balancea al extremo de su cadena.
- Bendición: Puede convertir lo que toca en su equivalente mecánico. Así, por ejemplo, puede tocar un árbol y éste se volverá metálico, con engranajes y muelles, hojas y flores hechas de láminas de latón y con un pajarito cucú que saldrá de un agujero a intervalos regulares. Este efecto es temporal, durando menos en seres vivos y cuanto más complejo sea el ser, y siendo ineficaz en humanos o Lies.

Puede controlar los objetos mientras están en su forma mecánica. Así, en el caso del árbol del ejemplo anterior, podría hacerlo florecer a voluntad, e incluso hacer que diese frutos (probablemente naranjas mecánicas). En caso de verse involucrado en una lucha, utiliza esta habilidad para que algo luche por él, normalmente su espantapájaros.


Biografía: su vida dio comienzo en un barrio marginal de la ciudad, hijo de un padre ausente y una madre poco preocupada por su bienestar, y fue el inicio de una serie de eventos que conformaron la extraña personalidad de Koumori.

Se le pudo considerar un niño normal hasta la edad de cinco años, pues en ese momento fue que el Destino metió baza y comenzó a servirse de él como un juguete para sus designios o quizás como oscura y cruel diversión. Viviendo en un hogar desatendido, no le era difícil escapara a la poco atenta vigilancia de su madre y deambular por las callejuelas. Y en una ocasión esos vagabundeos infantiles le llevaron más lejos de lo que había llegado antes, hasta un lugar en el que no debería haber estado.

Explorando las alcantarillas dio por accidente con el umbral que separa la ciudad humana del mundo de los Lies, e inadvertidamente lo cruzó. Nadie sabe qué pasó allí, ni él mismo recuerda qué horrores presenció ni de qué modo logró sobrevivir, pero lo hizo. Logró encontrar la salida y regresó a la ciudad, aunque para ese entonces su pelo había encanecido por completo y una extraña sonrisa ocupaba sus labios.

Desde entonces dejó de responder a su nombre y sólo respondía al de "Koumori Warai", que él mismo eligió. Su comportamiento también varió de un modo que acabó provocando el rechazo de su madre y de quienes le conocían. Por otra parte, como un acto de defensa subconsciente frente al caos que se había adueñado de su mente, fue despertando en él la bendición que le permitía hacer que el mundo a su alrededor tuviese el orden y la precisión de un mecanismo de relojería, como una metáfora de el orden y la seguridad que la parte aún racional de su mente anhela.

También a medida que fue creciendo fue despertándose en él el anhelo de ser Velador, como si buscase de ese modo proteger a otros de aquello que le sucedió a él. Entró en el cuerpo de Veladores y, de algún modo, su estrella le fue guiando por diversos ascensos hasta llegar a ocupar el puesto de asistente de la alcaldesa.

Datos Adicionales: Posee una pequeña casita con un huertecillo en el que descansa su espantapájaros cuando no lo está usando.

Espantapájaros